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Se esperaba una fiesta. Por primera vez en años dos títulos de Chile estarían en disputa en una misma noche y le mesa estaba servida para una fiesta en la Casa del Deportista de Iquique. Pero en vez de hablar del boxeo de Mario Contreras o del corazón que demostró Octavio Faúndez, lo que nos convoca en este artículo son los jueces, que nuevamente empañaron una noche que estaba destinada para ser histórica en nuestro país.

Respecto del combate hay que decir que Mario Contreras dominó durante todo el combate. Faúndez fue capaz de ganarle dos asaltos, pero no más. Por eso son inentendibles las tarjetas que entregaron los jueces 96-94 para Faúndez (Orlando Carvajal) y 95-95 (Alfredo Ramos y Humberto Cappona).

No fue un buen combate de Mario Contreras, eso es indesmentible, se le vio lento en sus desplazamientos, con muy pocas alternativas de ataque, muy centrado en castigar la parte alta del cuerpo de Faúndez y con pocas combinaciones. Sin duda, el año de inactividad lo sintió sobre el cuadrilátero Contreras pero aún así fue más que Faúndez durante el combate, sobre la base de un buen uso del jab y del uno, dos que permeó durante todos los asaltos la defensa del iquiqueño.

Por su parte, de Faúndez hay que destacar la entrega y la preparación física que realizó durante este combate. Se notó el trabajo de gimnasio pero fue muy poco lo que entregó para llevarse la victoria. Lanzó muy pocos golpes y generalmente terminaban en los brazos de Contreras. Muy pocos golpes directos y muy preocupado de proteger su defensa más que proponer algo en ataque.

Así se completaron los diez asaltos hasta llegar a la polémica decisión de los jueces, que pone en entredicho la labor de la Comisión a la hora de designar jueces, dado que estos tres jueces solo han ejercido en el boxeo profesional en combates donde estuvieron presentes boxeadores de Iquique o que representaron a esa ciudad.

Siempre hemos señalado que no se puede hablar de “robo” en el boxeo cuando hay una pelea pareja. Este no fue el caso, más allá de las declaraciones de Faúndez, que termina siendo además la principal víctima de la poca capacidad demostrada por el trío de jueces, lo cierto es que acá hubo una diferencia clara en favor de uno de los boxeadores, lo que hace pensar, en el mejor de los casos, que estamos en presencia de jueces sin la preparación adecuada para combates de la importancia que significa un título nacional.

Es de esperar que se tomen las medidas adecuadas y que, en una eventual revancha entre Contreras y Faúndez, se den las garantías necesarias para que al día siguiente podamos hablar de lo que ocurrió arriba del ring y no en las tarjetas de los jueces de turno.

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