Una dura caída sufrió el pasado sábado Juan “El Rocky de Cristo” Yañez, en California, Estados Unidos, luego que fuese despachado de manera fulminante por el ucraniano Oleksiy Barker, quien lo derrotó por KOT en el primer asalto.
Una derrota que dolió, no tanto por el resultado, sino que por la forma tan contundente y que dejó de manifiesto los principales yerros en el boxeo de Yañez, que a todas luces, no ha terminado de desarrollarse.
El púgil de Mulchén se refirió a su derrota en las redes sociales, señalando que “lamentablemente no se pudo ganar, quise seguir en la pelea, pero no me dejaron continuar. Esto me sirve para aprender y seguir mejorando en el boxeo”.
Asimismo el boxeador nacional agradeció el apoyo de los aficionados y a sus detractores los dejó invitados para que “presencien, en primera fila, cómo me levanto”. En esa línea recalcó que “seguiré entrenando con más fuerza que nunca y no descansaré hasta cumplir mi sueño de ser campeón mundial”.
Lo cierto es que Yañez no solo tendrá que trabajar en la parte física para cumplir sus metas, sino que también en la técnica, sobre todo el aspecto defensivo, dado que deja demasiado descubierta su guardia durante los combates, hecho que el ucraniano Barker aprovechó en las dos ocasiones que lo envió a la lona.