
El prodigio de 21 años conquistó el título ligero de la OMB en una guerra táctica y física que puso a prueba su temple ante un insistente y valiente Sam Noakes.
🥊 Abdullah Mason hizo historia en Riad al proclamarse campeón mundial ligero de la OMB con solo 21 años, en una pelea exigente que lo obligó a demostrar madurez, ajuste táctico y resistencia frente a un Sam Noakes incansable.
🔥 Los jueces vieron ganador a Mason por amplias tarjetas de 117-111 y dos de 115-113, un reflejo fiel de una contienda áspera, de intercambios constantes y de oscilaciones que mantuvieron la tensión hasta el final. Mason, ahora el campeón mundial masculino más joven del boxeo, tuvo que trabajar cada minuto del combate para imponerse.
💨 El inicio mostró a Mason intentando controlar la distancia con su alcance y velocidad de manos, mientras Noakes buscaba recortar el ring para lanzar combinaciones en corto. La estrategia parecía clara: Mason desde afuera, Noakes desde adentro.
👊 En el segundo asalto, el estadounidense halló el ritmo con un jab móvil y un zurdazo en retroceso. Noakes respondió con dos derechas sólidas, demostrando que no pensaba simplemente resistir, sino competir. El cruce de estilos creó un combate vibrante desde el comienzo.
💥 En el tercero, Mason estremeció a Noakes con un uppercut de izquierda, pero la acción se endureció con un choque de cabezas que abrió un profundo corte sobre el ojo izquierdo del británico. Aunque sangrante, Noakes no cedió en su presión.
⚡ Noakes avanzó sin descanso, obligado por su desventaja en velocidad y potencia a presionar a Mason para desgastarlo o encontrar un golpe decisivo. En el quinto asalto conectó una derecha que recordó al joven campeón que nada estaba asegurado.
🧠 Conforme avanzaban los rounds, Mason apostó por la inteligencia: elegir los momentos, evitar el desgaste prematuro y pelear a un ritmo que pudiera sostener. Era una decisión lógica para alguien que solo había pasado de seis rounds en tres ocasiones.
🔥 Esa cautela le permitía controlar los intercambios, pero también daba margen a Noakes, que aprovechó cada oportunidad. En el séptimo castigó al cuerpo de Mason y cerró el round en un toma y daca que animó al británico de cara al octavo.
💣 En el octavo, Mason fue al cuerpo con autoridad, drenando la energía de Noakes. Sin embargo, el duelo volvió a encenderse en el noveno, con Mason conectando zurdas limpias y Noakes respondiendo con ganchos cuando el campeón giraba para escapar.
🚨 En el décimo, los golpes al cuerpo hicieron retroceder a Noakes, y en el último minuto Mason lo tuvo tambaleando con una combinación al rostro. Aun así, Noakes rehusó amarrar y sobrevivió el asalto.
🔥 Lejos de estar acabado, Noakes salió al undécimo con ímpetu renovado. Castigó abajo, conectó un derechazo largo y un gancho de izquierda. Mason respondió con un uppercut que dio pie a otro cierre de round de alto voltaje.
🥵 El duodécimo fue un resumen del combate: presión, intercambios, fuerza contra finura. Mason necesitaba pegar duro para que Noakes no lo desbordara; Noakes necesitaba arriesgarlo todo. El campeón resistió, ajustó y completó su obra.
🏆 Mason, ahora 20-0 (17 KOs), confirmó su enorme potencial, pero también evidenció áreas por pulir, especialmente en defensa. A su edad, tiene margen de sobra para crecer como campeón.
💼 Noakes, 17-1 (15 KOs), perdió el invicto, pero ganó respeto. Dio un salto grande en nivel de oposición y estuvo lejos de ser superado. Si mantiene este nivel, volverá a disputar un título mundial más pronto que tarde.
🥊 En el combate previo, el peso mediano Vito Mielnicki obtuvo un nocaut técnico en el noveno asalto sobre Samuel Nnomah, tras enviarlo a la lona con derecha e izquierda. Mejoró a 22-1 (13 KOs), mientras Nnomah cayó por primera vez y quedó 21-1 (5 KOs).






