La cuarta defensa del cetro Pesado del Consejo Mundial de Boxeo fue exitosa para Deontay Wilder, quien luego de machacar y mantener a raya al mexicoestadounidense Chris Arreola, obligó a su esquina a detener el pleito luego de ocho asaltos en la Legacy Arena de Birmingham, Alabama.

Algunas veces con corazón, otras con estrategia y a veces sin ninguno de los dos, Arreola trató de competir con un Wilder que se vio sereno, que ha ido aprendiendo y que maneja muy bien su alcance hasta mantener a raya, en este caso, a su retador. Wilder mejoró a 37-0 y 36 nocauts, mientras que Chris se quedó con 36-5-1 y 31 fueras de combate.

Poca oportunidad tuvo Arreola en el combate y lo supo desde el primer episodio. El ‘Bombardero de Bronce’ lo atacó desde el primer episodio y lo fue desmoralizando. Al final le había derribado una vez, le cerró un ojo y le había cortado del otro en el evento estelar de Premier Boxing Champions.

Deontay con su mano izquierda ganó el pleito y con la derecha le advirtió a Arreola que no era bueno meterse con él. Luego de dominarlo a placer en los tres primeros episodios, le metió una fuerte combinación que mandó a la lona al californiano en el cuarto. Se levantó Arreola aún más desesperado.

En la esquina motivaban a Cristóbal mientras que Deontay le pedían mantener el ritmo. Se desplazó el campeón de un lado a otro del ring, por momentos lo llevaron a las cuerdas pero ahí amarró o dio pasos laterales para salirse de la presión ineficiente que le metía su retador.

El final llegó cuando, ya con el rostro lastimado y poca esencia de combate, la esquina de Arreola decidió aceptar que no había oportunidad para la sorpresa y detuvieron el combate, aceptando la supremacía de un Wilder que ha seguido sumando rounds como campeón y que ha noqueado a cada uno de sus cuatro enemigos como monarca.