Cuando se está en el inicio de una carrera profesional en el boxeo, lo normal es que se busquen rivales accesibles que sirvan para otorgar confianza e incrementar el record personal que siempre es una estadística muy cotizada por los promotores.

Por eso, más allá de la calidad del rival que en este caso dejaba bastante que desear, lo importante a la hora de analizar en este tipo de peleas es la contundencia que pueda mostrar el boxeador con mayores pergaminos y en ese item podemos afirmar que Julio Álamos cumplió y lo hizo con creces.

Porque si tienes un rival que no te opondrá mayor resistencia lo importante es acabarlo rápido y de manera clara y eso fue lo que hizo Julio que solo necesito de dos asaltos para dejar en claro que es un pugilista de mayor categoría.

La pelea contra el brasileño debutante Anderson de Jesús pudo terminar antes, en el primer asalto, pero la campana salvo al púgil brasileño que sufrió dos cuentas de protección en el primer episodio debido a la contundencia de los golpes de Álamos que mostró un jab bastante preciso y unos rectos poderosos que siempre se colaron en la débil resistencia de De Jesús.

Ya el segundo asalto fue un trámite que terminó rápidamente gracias a un potente golpe del chileno que hizo que su rival decidiera no continuar en una pelea de la cual no tenía ninguna opción de salir victorioso.

Con este triunfo Álamos aumento a dos victorias, con dos nocauts su record que permanece invicto y el cual podría sumar otra pelea ganada más cuand suba al ring del Teatro Caupolicán este 19 de noviembre para enfrentar a un rival argentino.