Los conocedores del boxeo saben muy bien quiénes son los dos sobrenaturales boxeadores que se encuentran en esta imagen. Para los aficionados más nuevos son Antonio “Kid Pambele” Cervantes y Roberto “Mano de Piedra” Duran. Se preguntarán por qué traigo a colación unos boxeadores bastante pasados de moda, pero leyendas a fin de cuenta. La razón, es porque ambos coincidieron en la llamada “época dorada del boxeo” y no se enfrentaron.
En el año 1978 Roberto Duran era el rey en la división de peso ligero, con 63 victorias y un solo revés (con Esteban de Jesus, el cual lo vengó 2 veces), a su vez, el Colombiano tenía 83-10-3, y llevaba en total 13 defensas acumuladas de su título Superligero AMB. Esta pelea tenía todo para ser excelente. Ambos boxeadores dominantes en sus respectivos pesos, los dos boxeadores latinos y de gran fanaticada a nivel americano, ambos pregonaban ser los mejores latinos de todos los tiempos, entonces ¿por qué no se realizó esta gran pelea? Cabe señalar que Roberto Duran fue campeón en 4 categorías, no obstante, fue campeón Ligero, Welter, Superwelter y Mediano. Extrañamente se saltó las 140 libras, vale decir la división donde Kid Pambelé reinaba.
Muchos podrán decir (como está de moda en la actualidad), Duran le tuvo miedo a Pambele, por eso subió a las 147 libras directamente, irónicamente, ese salto lo dio contra nadie más y nada menos que Sugar Ray Leonard. ¿Habrá sido entonces otro factor? ¿Quizás se subió mucho de peso? La respuesta a la gran pregunta la tiene la sombra en ese entonces de Roberto Duran, la persona que dirigía su carrera, el verdadero responsable de que esta pelea no se pudiera dar, el conocido manager panameño Carlos Eleta (Q.E.P.D). En una oportunidad un periodista panameño, muchos años después de que esta pelea no se diese, incluso cuando ambos boxeadores estaban retirados, le preguntó a Eleta cuál fue el motivo por el cual Durán no se enfrentó a Pambele, la respuesta del manager fue categórica y totalmente inesperada “muy peligroso ese Pambele”.
Esto, aunque muchos no lo crean, ocurrió bastante en la antigüedad, y, en la actualidad, se siguen viendo estos casos. Normalmente el fanático casual no sabe reconocer cuándo un boxeador quiere algo pero su promotor y/o manager quiere otra cosa. Yo les hago una pregunta, ¿Ustedes creen que Roberto Duran, que llegó a pelear hasta con tipos de 168 libras, le tenía miedo a Pambele? o que Antonio, en toda su esplendor como rey de las 140 libras, llegando a enfrentar a Aaron Pryor, ¿le tenía miedo a Roberto Duran?
El miedo en el boxeador no existe. El miedo del manager o del promotor SÍ EXISTE.