Colchaguino, policía y sobre todo, un guerrero. Heriberto Rojas fue el primer ídolo de este deporte en nuestro país, en una época en que las peleas eran a puño limpio y ganaba el que terminara en pie. Fueron cerca de 20 años de carrera donde cosechó elogios que lo llevaron a ser considerado, en su momento, como uno de los mejores pesos pesados del mundo.[2]

Heriberto Rojas, el primer campeón peso pesado de Chile quien alcanzó la fama en 1917 al lograr el título sudamericano de boxeo en esta difícil categoría. Para Chile este era un caso poco común ya que la mayoría de los púgiles que producía el deporte nacional eran de contextura más bien menuda, sin embargo, Heriberto Rojas de gruesas extremidades y prominentes espaldas combatía con cuanto gigante se le presentara, entre estos siempre figuraban afro americanos como William Daly, Calvin Repress y Bob Devere de 101 kilos quien puso fin a su prolongada carrera de triunfos. Pero esta columna no es específicamente para hablar de la prolífica carrera de Rojas quien combatió sin cesar[3] desde 1905-1919, sino que también hablar de su labor en la difusión de los deportes de combate en Chile, de los cuales Rojas fue un fuerte impulsor, así como también se asocia su participación con los primeros centros boxeriles e incluso los primeros encuentros deportivos masivos en Chile, también es importante rescatar su labor como profesor, entrenador, second, luchador e incluso activo participante en diversos manuales de boxeo y lucha que fueron publicados en Chile desde 1905 a 1920, el primero del que se tiene registro es de 1907[4], el “Método practico de boxeo”, el cual aparece su fotografía como uno de los cultores del boxeo “científico” nacional, también en el completo e ilustrado manual de 1917,[5] “El boxeo, deporte completo y científico”, publicado por Felipe Zuñiga en 1917. En este manual Rojas explica mediante a fotografías gran parte del repertorio de técnicas tanto ofensivas como defensivas. A su vez Rojas de profesión policía, también fue instructor de esta disciplina por largos años en la 4ta comisaria de Santiago, pero también junto al infatigable luchador y profesor de cultura física, Amadeo Pellegrini difundió el Jujitsu, la lucha grecorromana y las competencias de fuerza. Rojas fue un verdadero Sportman, quien el código ético-estético de la época alcanzaba el máximo ideal de la masculinidad por medio de una estricta disciplina y la constante práctica deportiva.

Rojas ejerció durante varios años la docencia de estas disciplinas y de hecho además del box, tuvo una enorme influencia en la práctica y difusión de los deportes de contacto durante el primer cuarto del siglo XX. En 1927 se vuelve a ring, pero esta vez no como boxeador, sino que, como luchador grecorromano, es claro era un peso pesado y con los años había aumentado de peso, pero no por eso su condición física se había visto desmejorada, logrando varias victorias en esta disciplina. En este mismo año en la principal revista deportiva “Los Sports” se abre un áspero debate sobre la real  capacidad técnica de Rojas, entre el periodista-réferi Ventura Debezzi y el ya célebre Juan Budinsh[6] el difusor teórico-práctico del boxeo en Chile, quien defiende que desde 1905 a 1910 Rojas no hiso sino aprender la más perfecta técnica, que el mismo trajo desde Estados Unidos, a esos años el único cultor teórico del boxeo en Chile era Budinish y de ahí que su juicio pesara, sin embargo los argumentos de Debezzi también son contundentes ya que en su calidad de referí tuvo primera tribuna en los encuentros y define el estilo de Rojas como destructor, en especial durante el combate contra Zarate, en el cual este último solo era una masa informe de sangre al terminar el encuentro y por lo tanto Rojas era un gran púgil que se imponía por su cuerpo y volumen de golpes aunque sin la necesaria “ciencia” tan solicitada por los medios especializados, sin embargo cuando se hace esta crítica por parte de los medios de la época, debe tomarse en cuenta como viajaba la información en una época en que el porcentaje de alfabetización era bajo el 40% y más aún el conocimiento del idioma ingles que hasta el día de hoy es privativo cuando se habla de estudiar la “dulce ciencia” del boxeo. Al juicio de la historia Rojas es un innovador y un pedagogo, esos que tantas veces faltan en los deportes, cuando solo gritamos por estrellas, pero nos olvidamos como formarlas. Heriberto Rojas sin duda merece un importante lugar en la historia del boxeo en Chile pero también un importante lugar en la labor en la difusión de los deportes de contacto, así como fue impulsor de la cultura física.

Rojas fue un incansable deportista, estudioso, docente y explorador de las disciplinas deportivas que por su formación le eran más cercanas. Rojas no solo fue el “campeón sudamericano” de los pesos pesados. Fue mucho más que eso desde su labor como docente, entrenador, modelo de libros y manuales, luchador, fue un incansable deportista que nunca se abatió ante la falta de resultados, sino que por el contrario busco evolucionar en un medio que veía la práctica deportiva como formativa de la masculinidad y un aporte. Su relación con Amadeo Pellegrini y Ignacio Selpulveda, Max Gallant y otros “Strongman” fueron la base para la introducción del Judo, Jujitsu, Halterofilia y la lucha grecorromana en Chile. Heriberto Rojas demostró una y mil veces que los limites solo son impuestos, por quienes quieren respetarlos.

[1] Profesor de historia, investigador de temáticas relativas al boxeo en Chile. Contacto drouillas61@gmail.com

[2] Por Second disponible en http://revistaeldon.com/2015/01/05/el-padre-del-boxeo-chileno-heriberto-rojas/

[3] Record parcialmente disponible en http://boxrec.com/boxer/137154

[4] Método práctico de box.traducido del ingles e ilustrado con mas de sesenta fotograbados . Disponible en Memoria Chilena, Biblioteca Nacional de Chile http://www.memoriachilena.cl/602/w3-article-124194.html . Accedido en 28/5/2016.

[5] El Boxeo, deporte completo i científico :recopilación de los mejores métodos mundiales tratada en forma práctica i nacional.

Santiago de Chile : Publicada por Greene i Zúñiga Hnos., 1917 (Santiago de Chile : Soc. Imprenta Universo)

[6] Los Sports, n°s 200-251 (7 ene. – 30 dic. 1927) . Disponible en Memoria Chilena, Biblioteca Nacional de Chile http://www.memoriachilena.cl/602/w3-article-124405.html . Accedido en 28/5/2016.