Los inicios de la Federación de Boxeo se remontan al primero de mayo de 1915, año en el que no vio mucha acción, particularmente debido al incidente de Adolfo Morales en septiembre de 1911. Cuando en vísperas de las fiestas patrias el mencionado boxeador peso pesado murió en un combate contra Dave Mills un norteamericano que por esos años hacia parte de la escena nacional. La muerte tuvo lugar en un combate, que estuvo lleno de irregularidades en torno a la organización del evento, desde el árbitro negligente hasta la pésima calidad del ring. Este grave incidente ocasiono que existiera una censura sobre el boxeo en la comuna de Santiago y fuera prohibido. De esta manera el boxeo por esos años se realizó de manera clandestina en los límites de la ciudad, en el American Circus de Recoleta o el Campo los Sports de Ñuñoa en los lindes del actual Estadio Nacional.

Así el boxeo hacia 1915 era una actividad prohibida y cuestionada, esto llevo a una serie de empresarios locales, impulsores del deporte como restitución del espíritu nacional, ante las llamadas “enfermedades sociales”.  Es  así como se llegó a fundar la Federación de Boxeo de Chile el 1 de mayo de 1915, con la intención de difundir los deportes de combate y de gabinete (interior) tales como la lucha grecorromana, el Jiujitsu, la gimnasia alemana y las competencias de fuerza antecesora de la actual halterofilia. [1]Sin embargo la prohibición sobre el boxeo obligó a esperar hasta 1916, año en que se levantó una vez corregidos los problemas organizacionales y de producción de eventos que habían acarreado la muerte de Morales. Así el 16 de junio de 1916 se organiza el primer directorio de manera transitoria, hasta 1917 cuando adquiere la personalidad jurídica y el empresario nacional Benjamin Tallman quien era un ferviente impulsor del deporte en Chile, perteneciente a los directorios de ligas de fútbol, de atletismo y presidente de tres clubes de boxeo. El Tallman Boxing Club, El club Intimidad (club obrero perteneciente a su propia fábrica de cigarrillos Intimidad) y el Carpentier Boxing Club, famoso por sus pugilistas hasta 1924.  La Federación Chilena de Boxeo nace en un país que hacia 1917 se enfrenta a un ambiente convulsionado por un movimiento obrero activo y las distintas capas de la sociedad se organizan en torno a movimientos de “regeneración” como es la respuesta del deporte desde las clases acomodadas, para competir las enfermedades venéreas, el alcoholismo y el socialismo. Desde la otra vereda están los movimientos obreros de izquierda que en sus inicios solo ven el boxeo como un fenómeno similar a un circo romano, sin embargo con el desarrollo de los deportes hacia 1930 esta opinión comenzará a cambiar. Durante la década de 1920, surgió otra agrupación que compitió directamente con la Federación de Boxeo, la Asociación de Centros de Box de Santiago,  que hacia 1923 organizaba encuentros a 20 asaltos y con dudosas condiciones deportivas. Los eventos muchas veces estaban reñidos en los pesajes y los árbitros eran pocos y de escasa preparación, esto hasta la titánica tarea de Temistocles Saez Soro[2], quien forma un cuerpo de árbitros y jueces a nivel nacional desde las universidades de Chile, Católica y de Concepción. Fue finalmente esto lo que limitó el crecimiento de la paralela Asociación de Centros de Box, así la Federación nació desde un opulento ambiente en el cual, la organización de un cuerpo de jueces de árbitros y la paulatina normalización de los eventos de box,  hacia 1939, dio la supremacía en el territorio nacional a la Federación de boxeo de Chile. Que hoy cumple 102 años.

 

[1] Revista Ring, Santiago 2 de junio de 1917. Nº1 abril.

[2] Vease http://www.elquintopoder.cl/deporte/temistocles-saenz-soro-el-boxeador-aristocrata/